"Cada Navidad recuerdo lo que me contaron

Los Maestros Arbóreos hace muchos años.

 

"Es una historia profunda y conmovedora

acerca del origen

de lo que llamamos Árbol de Navidad,

en tiempos muy remotos,

en el NORTE del continente Europeo.

 

"Actualmente, la Navidad son fiestas

TRISTES para los Espíritus de la Naturaleza,

por el recuerdo de "cómo fueron las cosas",

y cómo dejaron de ser.

 

"El ser humano moderno se ha convertido

en un ser que todo lo devora

dejando nada más que suciedad

y desorden a su paso.

 

"Pero hubo un tiempo

en el que no fue así.

 

"Esta historia la ESCUCHÉ

en un bosque REAL,

y me fue contada por árboles reales.

 

"Y eso fue gracias a mi COMPROMISO

AMOROSO

y ESPIRITUAL

(ambas cosas)

que me llevó a vivir CON

La Naturaleza,

en lugar de vivir convirtiendo mi amor por Ella

en algo platónico e ideal,

siempre aplazado para más tarde

o convertido en símbolo

de vete a saber qué.

 

"Así, llegó el invierno del 2007...

y nevó así como en la foto de arriba de todo

o esta de abajo:

"Y la nieve se congeló de noche

en las ramas de árboles y arbustos.

 

"Y pasaron los días y salió el sol

y empezó a producir

maravillosos destellos

en el hielo colgante de las ramas.

 

"Es imposible fotografiar eso,

o lo era con las cámaras de antes.

 

"Podría retocar las fotos

y añadir destellos,

pero no lo haré,

para dejar constancia de la dificultad de expresar

algo increíblemente HERMOSO

que solo es posible valorar

viéndolo presencialmente".

"Y es que los destellos emiten arco iris

centelleantes, en miniatura,

y su brillo es cegador.

"Pero si alguien piensa que la cosa trata

acerca de que el verdadero Árbol de Navidad

era un Árbol con Nieve congelada

y centelleante,

se habrá equivocado.

 

"Eso solo fue el DETONANTE

que me llevó a pasear más y más por un bosque,

y a sentarme en la nieve, junto a los árboles,

y ahí ellos me empezaron a contar...

lo que enlazo aquí abajo.

"Si habéis escuchado la historia,

ahora podréis entender

qué son estos arbolitos "de verdad"

que hay en las fotos de abajo,

con fruta y dulces colgados en sus ramas.

 

"El Árbol de las Ofrendas solía ser más grande,

pero en estos casos

elegí árboles bajitos y pequeños

para hacerlos accesibles

a los NIÑOS de verdad

(a los que conté esa historia)

para que colgaran ahí sus regalos

para los seres del bosque"

"Pues otra verdad es esta:

Así como no es creíble

amar a la Madre Naturaleza

y vivir separado de Ella

(o desligado de su cuidado),

tampoco es creíble amar a los niños

y no ocuparse nunca

de ninguno,

o desligarse de su presencia y cuidado.

 

"Y parte del cuidado

es contar HISTORIAS

que sean verdaderas

aunque sean como cuentos.

 

"Historias que nutran el ALMA

y la lleven de regreso

a la Humanidad Verdadera,

aunque sea por instantes...

o en un sueño.

"Las Hijas de MADRE NATURALEZA,

si de verdad somos eso,

nos parecemos a Ella en la ESENCIA,

es decir en el comportamiento.

 

"Quiere decir que somos MADRES

y/o cuidamos de niños "maternalmente".

 

"Y quiere decir que nos OCUPAMOS

de "algo" de la Naturaleza,

aunque sea mínimo.

 

"El resto...¡son fantasías!

Madre y Naturaleza es eso: Maternar

y cuidar de lo Natural,

y no hay más historias!

"La semejanza con la Madre Naturaleza

no está en la FORMA

ni en tener un aspecto así o asá

(habéis visto muchas películas)

sino en LOS ACTOS

y en la manera de vivir.

 

"Si quieres volver con la Madre Naturaleza,

pídele que te recuerde SU LEY

y te enseñe o inspire

para maternar en tu espacio

y cuidar la vida que crece.

 

¡Ese es todo el asunto!

 

"Y de acuerdo, podemos hablar también

del PADRE NATURAL,

y de hecho, pronto hablaré de Él,

pero primero era necesario

hablar de la Madre"

(Arriba, pintura de Cathy MacLelland)

 

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